miércoles, 6 de mayo de 2020

Crónica de un derrumbe anunciado

El Muro de Berlín y las Torres Gemelas, pese a tener distinto origen y valoración, constituyeron pasos previos de un derrumbe anunciado, una suerte de Gran Hermano ecuménico, en el que la realidad misma va tejiendo la trama del destino que espera al sistema: su inexorable destrucción.
Desde sus distintas expresiones, las dicotomías ideológicas (peronismo-antiperonismo, demócratas-republicanos, laboristas-conservadores, etc) parecen converger hoy en una grieta única que podemos definir como igualdad/desigualdad. Y como toda antinomia humana, define dos grandes corrientes en las que es inevitable militar pasiva o activamente. Así es como muchos emergentes de cada actividad pública se vieron obligados a revelar su verdadera identidad, con no pocas sorpresas. A nadie extraña que personajes de la política hayan dado el salto cuántico (Borocotó, Cobos, Pichetto, Suarez Lastra), menos esperable fue descubrir la verdadera identidad de otros "súperheroes" (Aguinis, Martínez, Brandoni, Casero). Y menos inesperada aún es la permanencia de muchos personajes menores en la defensa de intereses ajenos, generalmente a cambio de monedas (periodismo servil y clase media/o confundida).
Lo verdaderamente sorprendente fue la chorrera de acciones que el exclusionismo puso en marcha para conservar un orden de cosas cada vez más frágil. En estos días de aislamiento fuimos testigos de iniciativas entre groseras e infantiles, desde oponerse al aislamiento en favor de la economía, pasando por la negativa al impuesto a las grandes fortunas, el cacerolazo para reducir el sueldo de los políticos y en favor del miserable Rocca, la liberación de "violadores y asesinos", la tierna travesía por la democracia, hasta la importación de espías cubanos ocultos tras la condición de médicos.
Nada de esto debería asombrar, se trata de recursos de última hora para torcer un rumbo que parece definido, no sólo a nivel local sino también internacional. Pero lo que anima esta reflexión es la última propuesta anunciada: la insólita marcha para impedir el rebrote comunista (!!!) en el país. Y más sorprendente aún que la propuesta, de origen archi-conocido, será la respuesta que obtendrá por parte de aquella clase media/o confundida. No obstante, será también una buena excusa para saber si realmente estamos rumbo al cambio fervorosamente deseado en el mundo, o se trata del simple efecto de un "bichito travieso" que pasará sin ningún acomodamiento del sistema. En todo caso, por ahora...